Lluvias que traen flores
Con las últimas lluvias se ha acabado llenando todo, ahora ya la reserva puede aguantar una buena temporada; también estas aguas han venido más frías que las anteriores incluso con truenos. Son las “chamuscas”, mas habituales en febrero y marzo que hacen el tiempo muy inseguro; parece que escampa y se pasa, pero al poco rato está lloviendo otra vez, el paraguas pues siempre a mano.
Con este regalo de agua todo prospera, por ejemplo las escobas, que ya tenían flor antes de empezar a llover, con el agua se han multiplicado y mantenido, no le coge más flor, están atiborradas. Si no llega a llover, esa flor ya se habría agostado y caído.
Se parecen a los cerezos del Jerte (¡que lástima! Ya podían…)
Con este regalo de agua todo prospera, por ejemplo las escobas, que ya tenían flor antes de empezar a llover, con el agua se han multiplicado y mantenido, no le coge más flor, están atiborradas. Si no llega a llover, esa flor ya se habría agostado y caído.
Se parecen a los cerezos del Jerte (¡que lástima! Ya podían…)